as una semana de dilaciones y haciendo caso omiso de las amenazas de Donald Trump, la Comisión Europea anunció el viernes que impondrá una multa de 2.950 millones de euros (casi 3.500 millones de dólares) a Google, por considerar que el gigante tecnológico estadounidense abusó de su posición dominante en el sector de la publicidad en línea, al favorecer sus propios servicios en este sector en detrimento de sus rivales.
Y le dio un plazo de 60 días para poner fin a estas prácticas, según informó la institución en un comunicado. Enseguida, el presidente de Estados Unidos amenazó a Bruselas con sanciones comerciales.
“Europa ‘atacó’ hoy a otra gran empresa estadounidense, Google”, protestó Trump en su red social Truth Social, donde afirmó que si la Unión Europea no revierte las multas “injustas” impuestas a Google y también a Apple, se verá “obligado” a activar un mecanismo punitivo de aranceles aduaneros, la “Sección 301”.
US President Donald Trump posts on Truth Social, “Europe today “hit” another great American company, Google, with a $3.5 Billion Dollar fine, effectively taking money that would otherwise go to American Investments and Jobs. This is on top of the many other Fines and Taxes that… pic.twitter.com/vfM02FJT8m
— ANI (@ANI) September 5, 2025
La sanción anunciada por la Comisión Europea es la segunda más alta jamás impuesta por el Ejecutivo comunitario por abusos monopolísticos, por detrás de la multa de más de 4.000 millones también a Google por violar las normas comunitarias de competencia a través de Android.
Esta sanción conocida como Adtech, que Google anunció inmediatamente que iba a impugnar, era muy esperada. La Comisión había amenazado en 2023 con exigir la escisión de parte de las actividades del grupo en este ámbito de la publicidad en línea, algo que finalmente no ha decidido hacer por el momento.
El anuncio de la multa contra el gigante estadounidense se retrasó a principios de semana, en un contexto de tensiones entre la Unión Europea y Estados Unidos, como confirmó el miércoles a AFP una fuente de la Comisión.
El 26 de agosto, Donald Trump atacó enérgicamente a los países y organizaciones que regulan el sector tecnológico, amenazándolos con aranceles y restricciones a la exportación.
Aunque no mencionó directamente a la UE, el bloque dispone de hecho del arsenal jurídico más potente del mundo para regular el sector digital, lo que alimenta los debates en Europa sobre el riesgo de represalias en caso de sanciones contra empresas estadounidenses.
La UE respondió que tenía “el derecho soberano” de regular la tecnología.
Además de multar a la compañía, Bruselas ha exigido a Google que ponga fin al comportamiento que favorece sus propios servicios de tecnología publicitarias y a adoptar “medidas para erradicar sus conflictos de interés inherentes a lo largo de la cadena de suministro de tecnología publicitaria o ‘adtech'”.
“La decisión muestra que Google abusó de su posición dominante en ‘adtech’ perjudicando a editores, anunciantes y consumidores. Este comportamiento es ilegal bajo las normas de competencia de la UE y Google debe ahora presentar correcciones serias para atajar sus conflictos de interés”, dijo la vicepresidenta de la Comisión Europea Teresa Ribera, quien lidera la cartera de Competencia.
La española avisó también a la tecnológica de que Bruselas “no dudará en imponer” correcciones “serias” a Google si la firma, que tiene un plazo de 60 días para comunicar las medidas, se niega a subsanar su comportamiento.
En una declaración a AFP, Google criticó duramente la sanción de la Comisión.
“La decisión de la Comisión Europea sobre nuestros servicios Adtech es mala y la recurriremos. Nos impone una multa injustificada y cambios que afectarán a miles de empresas europeas, ya que les resultará más difícil ganar dinero”, declaró Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de Google encargada de asuntos regulatorios.
Es la tercera multa impuesta esta semana a Google, filial de Alphabet.
El grupo fue condenado el miércoles en Estados Unidos a pagar 425,7 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios a casi 100 millones de usuarios por violar su privacidad, según la decisión de un jurado de un tribunal federal de San Francisco confirmada por el gigante estadounidense.
Y el jueves, recibió una multa récord de 325 millones de euros impuesta por la autoridad francesa de control de la privacidad (Cnil) por incumplimientos en materia de privacidad y cookies.
Sin embargo, el grupo obtuvo el martes una importante victoria judicial en Estados Unidos: un juez de Washington le impuso estrictos requisitos sobre el intercambio de datos con el fin de restablecer la equidad en la competencia en las búsquedas en línea, pero sin obligarle a ceder su navegador estrella Chrome, como exigía el gobierno estadounidense.