De la NBA al fútbol. Pavel Podkolzin, ex jugador de los Dallas Mavericks en la liga norteamericana, debutó en la Copa de Rusia y batió un récord histórico con el Amkal Moscú: se convirtió en el jugador más alto de la historia del fútbol. Nada más y nada menos que 2,26 metros de altura, superando por quince centímetros a quien ostentaba dicha marca.
Y es que el récord lo tuvo durante mucho tiempo el inglés Kyle Hudlin, ex jugador del Huddersfield Town y del AFC Wimbledon, que le bastó con sus 2,10 metros para ser el más alto del planeta junto a otro futbolista. El segundo, también de la misma altura, era Simon Block Jorgensen, portero danés que juega actualmente en divisiones inferiores de Inglaterra.
Podkolzin está a tan solo 18 centímetros del larguero de la portería, lo que lo convierte en un peligro evidente a balón parado, tanto a nivel defensivo como ofensivo. El jugador ruso, que sufre acromegalia y un trastorno de la pituitaria, se convirtió en uno de los ‘gigantes’ de la NBA en la primera década del siglo junto a los Dallas Mavericks.
Pavel Podkolzin, en su debut en el fútbol ruso / X
Aun así, los de Dallas no fueron los que eligieron al jugador en el Draft. Fueron los Jazz, que escogieron al ruso en el puesto 21 de la lotería de 2004, traspasándolo esa misma noche a la franquicia en la que jugó. Eso sí, tan solo un total de seis partidos. Se convirtió en uno de los diez jugadores más altos de la historia de la NBA, aunque sin superar a otros como Manute Bol o Georghe Muresan.
Tras su fracaso en Estados Unidos, optó por volver a su tierra y probar suerte en el Khimki. Era el año 2006, el último en el que jugaría en la élite del baloncesto. El resto de su carrera transcurrió en equipos inferiores, aunque ahora ha vuelto a destacar su figura en otro deporte. Concretamente el fútbol.
“Bueno, esta es una gran oportunidad para estar en este deporte. Nuestro presidente me llamó, ya que jugábamos en el mismo equipo en la Liga de Baloncesto de Medios. Y ahora me ves, con un equipo de futbol en la copa. Así que no sé qué decir. El clima es estupendo, la ciudad estupenda. Quiero agradecer a mis compañeros por esto“, comentó Podkolzin.
El ruso estuvo cerca de marcar un gol a los pocos minutos de saltar al terreno de juego, pero el balón fue interceptado por el portero rival. “Sí, saqué el tiro con mis zapatos, pero casi lo logramos, solo que ellos tienen un buen portero. Intentaré marcar en el próximo partido“, dijo.
Podkolzin tampoco olvida su etapa de la NBA y no dudó en dedicar unas palabras a Estados Unidos. “Un saludo a Dallas, a todo el país, a Estados Unidos. Fueron momentos geniales, pasando un par de años ahí con ellos. Pero ahora estoy jugando al fútbol aquí”, confirmó.