Este lunes, el presidente ruso Vladímir Putin oficializó la ratificación del Tratado de Asociación Estratégica Integral entre Rusia e Irán, firmado inicialmente el 17 de enero de 2025 en Moscú junto al presidente iraní, Masoud Pezeshkian.
El acuerdo, que Putin definió como “innovador” en su firma original, busca dinamizar las relaciones comerciales y económicas entre ambos países bajo el lema: “Menos burocracia, más acciones”.
El tratado establece una alianza igualitaria y de beneficio mutuo en múltiples áreas: desde seguridad y defensa, hasta cooperación económica, energética, científica y cultural. Además, contempla una política común frente a actos de agresión: ninguna de las partes apoyará directa ni indirectamente al agresor, y se fomentará la resolución pacífica de conflictos con base en la Carta de las Naciones Unidas.
La cooperación técnico-militar, la lucha contra el terrorismo internacional, el fortalecimiento de rutas de transporte como el corredor Norte-Sur, y el impulso en sectores clave como la energía, el agro y la banca, forman parte central del pacto.
Este acuerdo consolida una alianza estratégica en ascenso entre Moscú y Teherán, en un contexto geopolítico marcado por tensiones internacionales y nuevas dinámicas de poder global.