Ni las altas temperaturas ni la larga espera truncaron la celebración de los Thunder tras conquistar su primer anillo en Oklahoma. Después de vencer a los Indiana Pacers el domingo con un 103-91, la franquicia sucesora de los Supersonics desfiló por la ciudad delante de medio millón de aficionados en autobuses descapotables bajo los coros de “O-KC”
Los campeones del título seguían un itinerario que daba la vuelta por la ciudad de 700.000 habitantes, una ruta que finalizó en Scissortail Park, donde les esperaba un escenario donde la fiesta continuaba. Shai Gilgeous-Alexander, nombrado MVP de las Finales de la NBA y máximo anotador de la liga, paseó el trofeo mientras dejaba que los aficionados lo tocaran, caminando sin camiseta con una bandera canadiense envuelta en la cintura en homenaje a su país, mientras levantaba su mano izquierda al ritmo de los cánticos de “MVP, MVP” de la multitud.
Alexander se mostró agradecido con los aficionados mientras sostenía el trofeo denominado Larry O’Brian, “No olviden esto nunca”. “Momentos como este no siempre se presentan, ¡os queremos!”. Los jugadores que vestían camisetas de campeones, estaban eufóricos lanzando presentes a los asistentes. “¡Hagan ruido, OKC! “Han estado con nosotros en todos los buenos y los malos momentos del Thunder y se lo agradecemos“, dijo el base del equipo Luguentz Dort.
Las estrellas que habían iniciado su trayecto en el Paycom Center, continuaron hasta el estadio de los Thunder y llegaron hasta una el parque, bañaron en champán a los asistentes de la celebración tras bajar de los autobuses y caminar por las calles del centro de la ciudad, mientras posaban y saludaban alegres.
Los Seattle SuperSonics se mudaron a Oklahoma City justo para la temporada 2008-09, y los aficionados les apoyaron con entusiasmo en su transición a una nueva era, a pesar de sus complicaciones al principio. Los Thunders se convirtieron en un equipo con jóvenes estrellas como Durant, Westbrook y James Harden, y ahora con un nuevo conjunto de jugadores brillantes han conquistado el trofeo que tanto ansiaban.