Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “el Chapo” Guzmán, se declaró culpable de cuatro cargos relacionados con el narcotráfico ante un tribunal de Chicago, con lo que evita ir a juicio.
Guzmán, de 35 años, apareció este viernes con ropa naranja -la que usan los presos- y con esposas en los pies. Se lo vio con barba y lentes, una imagen que no se le conocía. Mediante audífonos, escuchó las preguntas de la jueza Sharon Coleman.
Los cuatro cargos incluyen tráfico de múltiples drogas (incluido el fentanilo) y participar en el crimen organizado. Al escucharlos, uno por uno, Guzmán iba respondiendo afirmativamente.
En concreto, admitió haber supervisado la producción y el tráfico de grandes cantidades de cocaína, heroína, metanfetamina, marihuana y fentanilo hacia Estados Unidos. También se declaró culpable de cargos de narcotráfico, lavado de dinero y armas de fuego.
Coleman fijará su sentencia dentro de seis meses, y previsiblemente Guzmán evitará la cadena perpetua al acceder a colaborar con la justicia. De esa manera eludirá la pena que le fue impuesta al Chapo tras un juicio celebrado en 2018.
Sin embargo, el fiscal puntualizó que solicitará una pena menor a la perpetuidad siempre que Guzmán “cumpla” con lo que se comprometió, es decir -aunque no lo dijo explícitamente- dé suficiente información a la justicia estadounidense para seguir persiguiendo el narcotráfico.
Guzmán tomó la palabra para asegurar que sufre depresión, diagnosticada el pasado octubre, y que por ello está tomando medicación, y dejó claro que nadie le había forzado para declararse culpable.
En su lectura de consideraciones previa a la formulación de los cargos concretos, la fiscalía destacó que Guzmán era “el líder de un cartel” (de Sinaloa), que había participado en el lavado de dinero y que había tenido responsabilidad en el secuestro y muerte de tres personas, lo que no fue negado por el acusado, que escuchaba atentamente.
La fiscalía pidió además que Guzmán pague 80 millones de dólares de multa, pero tanto el importe de la multa como la pena definitiva de prisión corresponderá fijarlas a la jueza Coleman.
Jeffrey Lichtman, un abogado de los Guzmán, no sabía si el caso contra Joaquín Guzmán López -hermano de Ovidio- podría resolverse con un acuerdo de culpabilidad. Dijo que es “completamente diferente”. Joaquín se encuentra en una prisión de Chicago tras entregarse voluntariamente y la semana próxima podría ir a los tribunales.
Ovidio (“El Ratón”) y Joaquín (“El Güero Moreno”) son dos de los cuatro hijos del Chapo conocidos como “los Menores” y “los Chiquillos”. También integran ese grupo Iván Archivaldo Guzmán Salazar (“El Chapito”) y Jesús Alfredo Guzmán Salazar (“El Alfredillo”).
Ahora la pregunta es qué alcance tendrá el acuerdo de culpabilidad de Ovidio Guzmán. Posee información privilegiada sobre el Cartel de Sinaloa o el Cartel Jalisco Nueva Generación y también podría incriminar a Ismael “el Mayo” Zambada, socio del Chapo en los inicios del cártel. También hay incertidumbre sobre si entregará datos sensibles para autoridades mexicanas.
El Chapo Guzmán cumple actualmente una condena de cadena perpetua en Estados Unidos tras ser declarado culpable en 2019 por su papel como exlíder del cártel de Sinaloa, habiendo traficado montañas de cocaína y otras drogas a Estados Unidos durante 25 años.
Los hermanos supuestamente asumieron el antiguo papel de su padre como líderes del cártel de Sinaloa.
Pero Ovidio Guzmán López fue detenido por las autoridades mexicanas a principios de 2023 y extraditado hacia Estados Unidos. Inicialmente se declaró inocente, pero en los últimos meses señaló su intención de cambiar su declaración.
Joaquín Guzmán López y otro de los líderes del cártel durante varios años, Ismael “El Mayo” Zambada, fueron arrestados en julio de 2024 en Texas después de llegar a bordo de un avión privado.
Con información de EFE y AP