
El lanzador dominicano José Ureña está a punto de vivir un momento inolvidable en su carrera: gane quien gane el título, ya tiene asegurado su primer anillo de Serie Mundial. El derecho lanzó esta temporada tanto para los Dodgers de Los Ángeles como para los Blue Jays de Toronto, los dos equipos que se enfrentan por la corona de las Grandes Ligas en 2025.
Ureña, de 33 años, tuvo apariciones con ambas organizaciones durante la fase regular, lo que lo convierte en campeón automático, sin importar el desenlace de la Serie Mundial. Una rareza estadística y una curiosa coincidencia del destino que ahora lo coloca entre los pocos jugadores que logran esta hazaña inusual.
Con los Dodgers, José Ureña vio acción en dos juegos, lanzando 3.0 entradas y permitiendo solo una carrera limpia, cumpliendo su rol como relevista de bajo perfil. Posteriormente, fue adquirido por los Blue Jays, donde participó en seis compromisos, sumando 12.1 episodios de trabajo con cinco carreras permitidas. Su aporte, aunque modesto, fue suficiente para que su nombre quedara registrado en las planillas de ambos equipos de la Serie Mundial.
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En contraste, el infielder Buddy Kennedy también comparte la curiosa condición de “campeón garantizado”, luego de vestir los uniformes de las dos novenas durante la campaña. Kennedy participó en siete encuentros con los Dodgers (1-17, 1 impulsada) y en dos con Toronto (1-5, un doble y una anotada).
La temporada 2025 será recordada como una de las más atípicas para ambos peloteros, pero especialmente para José Ureña, quien ha recorrido una carrera llena de altibajos desde su debut con los Marlins de Miami. Sin ser una figura mediática, el derecho dominicano ahora podrá presumir algo que pocos logran: un anillo de Serie Mundial garantizado, símbolo del esfuerzo y la perseverancia que lo han mantenido vigente en las Grandes Ligas.






