El actual ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, fue confirmado como candidato del partido Movimiento al Socialismo (MAS) para las elecciones presidenciales del 17 de agosto.
“¡Anunciamos con orgullo el binomio del MAS-IPSP rumbo a las elecciones generales! Después de un proceso de consulta con nuestras organizaciones sociales, presentamos al compañero Eduardo del Castillo como candidato a la presidencia, y al hermano dirigente Milán Berna como candidato a la vicepresidencia”, dijo el presidente del MAS, Grover García, en comunicado difundido el viernes 16 de mayo.
García aseveró que Del Castillo y Berna representan un símbolo de “la renovación, la firmeza y la lealtad al proceso de cambio”. También expresó: “Este binomio es del pueblo y para el pueblo”.
La candidatura de Eduardo del Castillo surgió luego de que el presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció el 13 de mayo que no concurrirá a la reelección. “Saludamos con entusiasmo y optimismo esta decisión y llamamos a las organizaciones sociales, a las fuerzas progresistas y de izquierdas, y al pueblo en general, a crear una estrategia unitaria para asegurar la continuidad del proceso de cambio, la existencia del Estado plurinacional y resguardar los logros de la revolución democrática y cultural ante las amenazas de una derecha retrógrada y neoliberal”, señaló Arce en sus redes sociales.
El mandatario también llamó a cerrar filas ante las divisiones internas del MAS. “La unidad no es una opción, es una necesidad. Si queremos seguir avanzando como país, debemos mantenernos cohesionados y comprometidos con el pueblo y sus demandas históricas”, indicó.
El mismo viernes 16 de mayo, el ministro Eduardo del Castillo dijo que la Policía de Bolivia detendría al expresidente Evo Morales si cumplía con su plan de marchar junto a seguidores desde Cochabamba hasta La Paz para insistir en que se le permita inscribir su candidatura para las elecciones de agosto.
“Le pedimos que se entregue voluntariamente a la Justicia boliviana”, dijo Del Castillo a Morales. Al mismo tiempo, reprochó al expresidente que continúe con sus aspiraciones electorales a pesar de que está inhabilitado constitucionalmente.
Sobre Evo Morales pesan desde octubre de 2024 hasta cuatro órdenes de detención por un supuesto abuso de menores en 2016, cuando habría mantenido una relación con un joven de 16 años, fruto de la cual nació una niña. Las autoridades han alegado “problemas logísticos” para detenerlo debido a la posibilidad de disturbios.
FUENTE: Con información de Europa Press/ La Razón