Desde la Iglesia La Divina Pastora, la vicepresidenta Delcy Rodríguez pidió por los atletas nacionales e internacionales y destacó los avances del Plan Nacional del Deporte, proyectado hacia los Juegos Olímpicos Los Ángeles 2028
Este 6 de enero, Venezuela conmemoró la tradicional Misa del Deporte, una celebración que rinde homenaje a los atletas del país y reconoce sus esfuerzos por enaltecer el nombre de la nación en competencias nacionales e internacionales. La ceremonia principal tuvo lugar en la Iglesia La Divina Pastora, en Caracas, y contó con la presencia de destacadas figuras como la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez; el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Pedro Infante; la alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez; el ministro para el Deporte, Arnaldo Sánchez, y la presidenta del Comité Olímpico Venezolano, María Soto. También asistieron deportistas, entrenadores y trabajadores del sector deportivo.
En su intervención, Delcy Rodríguez anunció que la 80ª edición de esta celebración se llevó a cabo en todos los estados del país. “Hemos venido a pedirle a Dios por nuestros atletas que participan en eventos nacionales e internacionales. También dimos gracias por los frutos que está rindiendo Venezuela en materia deportiva y pedimos por el Plan Nacional del Deporte, la masificación y la territorialización del deporte en los circuitos comunales, que ya marca la ruta hacia los Juegos Olímpicos Los Ángeles 2028”, expresó.
Además, Rodríguez agradeció los logros alcanzados por los deportistas, recordó a las glorias deportivas que ya han partido, y pidió por la paz, la tranquilidad y el futuro del país. Subrayó que “los venezolanos queremos paz, y seremos contundentes en unión cívico-militar y policial. Aquí hay un Estado garante de los derechos humanos y la paz”.
La Misa del Deporte tiene su origen en 1945, cuando el párroco Francisco Castillo Toro realizó una eucaristía en homenaje a los beisbolistas Salvador Argüelles y José Pérez Colmenares. Desde entonces, esta tradición se celebra cada 6 de enero y se ha consolidado como un espacio de unión y reflexión para la comunidad deportiva venezolana.
La ceremonia de este año no solo reafirmó el compromiso del gobierno y los atletas con el desarrollo del deporte, sino que también destacó su rol en la construcción de un futuro pacífico y próspero para Venezuela.