En un encendido mitin en el Santander Arena de Reading, el expresidente y candidato republicano Donald Trump lanzó duras declaraciones sobre la inmigración, describiendo la llegada de migrantes a la frontera suroeste de Estados Unidos como una “invasión de asesinos y depredadores de niños”.

Trump, que busca reconquistar la Casa Blanca, vinculó directamente el aumento de migrantes con la criminalidad, afirmando que muchos de ellos provienen de Sudamérica. Durante su discurso, hizo especial mención a Venezuela, sugiriendo que el gobierno venezolano ha enviado criminales a Estados Unidos: “¿Sabéis que el índice de criminalidad ha bajado mucho en Venezuela porque han enviado a sus criminales a Estados Unidos?”, afirmó el expresidente ante una multitud que lo ovacionaba.

Estas declaraciones se producen en un momento en que la inmigración sigue siendo uno de los temas más debatidos en la contienda electoral de 2024, particularmente en estados como Pensilvania, un ‘estado bisagra’ con 19 votos electorales clave. Trump ha utilizado su plataforma para endurecer su posición sobre la inmigración, buscando movilizar a los votantes conservadores, especialmente en condados como Berks, que en las elecciones anteriores votaron mayoritariamente por los republicanos.

El expresidente también hizo referencia a pandilleros, traficantes de drogas y matones que, según él, forman parte del flujo migratorio hacia EE.UU. desde América Latina, aunque no proporcionó pruebas concretas de sus afirmaciones.

El voto latino será decisivo en las elecciones de Pensilvania, donde 600.000 hispanos están habilitados para votar en los comicios del próximo 5 de noviembre. En 2020, este estado se inclinó por el presidente Joe Biden, pero los republicanos esperan recuperar terreno, apostando a la dureza en temas migratorios para atraer a votantes preocupados por la seguridad y la economía.