Putin se reúne con Witkoff y Kushner durante casi cinco horas

BERLÍN — El presidente de Rusia, Vladimir Putin, mantuvo conversaciones durante casi cinco horas el martes por la noche con Steve Witkoff, enviado especial del presidente Donald Trump, y Jared Kushner, yerno del presidente, negociando con los dos emisarios estadounidenses mientras Washington presiona para poner fin a la guerra de Rusia contra Ucrania.

Los negociadores discutieron el contenido de las propuestas de paz estadounidenses, pero no profundizaron en la redacción de ninguna disposición, no llegaron a ningún compromiso específico ni acordaron una nueva cumbre entre Putin y Trump, dijo a los periodistas el principal asesor de política exterior del Kremlin, Yuri Ushakov, después de que concluyeron las maratónicas conversaciones.

“El debate fue muy útil, constructivo y muy sustancial y duró no cinco minutos, sino cinco horas”, afirmó Ushakov.

Durante las conversaciones, Putin repasó las propuestas estadounidenses que el Kremlin había recibido en cuatro documentos antes de la reunión, dijo Ushakov.

“Pudimos estar de acuerdo en algunos puntos, y el presidente se lo confirmó a sus interlocutores”, dijo Ushakov.

“Otros temas provocaron críticas, y el presidente tampoco ocultó nuestra actitud crítica e incluso negativa hacia varias propuestas. Pero lo más importante es que se llevó a cabo una conversación muy fructífera”.

Un plan de paz estadounidense de 28 puntos, revelado el mes pasado, generó críticas de Ucrania y Europa por favorecer al Kremlin.

Algunas disposiciones se han suavizado, según informaron funcionarios estadounidenses, tras la opinión de funcionarios ucranianos y europeos sobre el plan.

Además de Ushakov, Kirill Dmitriev, director del Fondo Ruso de Inversión Directa, se unió a Putin durante las conversaciones del martes, que se prolongaron hasta pasada la medianoche, hora local, en el Kremlin.

Parte del debate giró en torno a la cuestión territorial, y Ushakov afirmó que algunas de las propuestas estadounidenses “parecen más o menos aceptables, pero deben discutirse”.

Otras propuestas “no nos convienen”, afirmó, negándose a entrar en detalles.

Ucrania ha rechazado las exigencias de Rusia de que Kiev entregue las tierras del este de Ucrania que aún controla.

“Aún queda mucho trabajo por hacer, tanto por parte de Washington como de Moscú”, dijo Ushakov, señalando que las dos partes acordaron mantenerse en contacto para avanzar en las conversaciones.

Witkoff y Kushner se trasladaron a la embajada estadounidense en Moscú tras la reunión para informar a Trump de los resultados de las conversaciones, según el asesor del Kremlin.

Kushner no tiene un cargo formal en la administración Trump, pero participó en la mediación del alto el fuego en la Franja de Gaza.

La visita de Witkoff a Moscú, la sexta desde enero, tuvo lugar dos días después de que las delegaciones estadounidense y ucraniana se reunieran en Miami para continuar las negociaciones sobre el posible plan de paz.

Ambas partes calificaron las conversaciones de constructivas, pero señalaron que se necesitaba más trabajo, sin detallar los asuntos pendientes.

Antes de las conversaciones, Putin hizo una serie de apariciones públicas para promover el progreso de Rusia en el campo de batalla y su resiliencia económica.

El líder ruso ha estado subrayando la ventaja de Rusia en la guerra y su voluntad de seguir luchando, en parte para convencer a sus interlocutores de que Ucrania está flaqueando en la línea del frente y debe conformarse con un acuerdo en sus términos.

Antes de la reunión del martes, Putin dijo que Rusia continuaría avanzando contra Ucrania en el campo de batalla y describió al liderazgo de Kiev como debilitado.

Afirmó que las fuerzas rusas ampliarían los ataques contra puertos y buques ucranianos en respuesta a los ataques contra la “flota en la sombra” rusa, los decrépitos barcos que el país utiliza para transportar petróleo y evadir las sanciones.

Putin también describió a los líderes ucranianos como ajenos a la realidad del frente.

“Los líderes ucranianos están actualmente preocupados por otros asuntos que no son la situación en la zona de guerra. Es como si vivieran en otro planeta”, declaró Putin el martes, refiriéndose al escándalo de corrupción que ha estado sacudiendo al gobierno del presidente Volodymyr Zelenskyy.

“Y además, constantemente en movimiento mendigando dinero, no tienen tiempo para asuntos de actualidad, ni en la economía ni en el frente”.

Zelenski, buscando el apoyo de sus aliados europeos, se reunió el lunes en París con el presidente francés, Emmanuel Macron.

El líder ucraniano viajó posteriormente a Irlanda para reunirse el martes.

Zelensky dijo que esperaría una actualización de los negociadores estadounidenses después de las conversaciones en el Kremlin y que posiblemente se reuniría con ellos el miércoles para una actualización.

El líder ucraniano advirtió en una declaración en la plataforma social X que cualquier acuerdo debía garantizar que Rusia no volviera a atacar a Ucrania después de las invasiones de Moscú en 2014 y 2022.

Putin ha exigido límites al ejército ucraniano, lo que significa que Rusia sería libre de aumentar su fuerza después de la firma de un acuerdo de paz, mientras que Ucrania enfrentaría restricciones.

“Debemos poner fin a esta guerra de forma que impida que Rusia regrese un año después con una tercera invasión”, escribió Zelenski.

“No lograron su objetivo de ocupar nuestro país. Pero no estoy seguro de que sus objetivos hayan cambiado”.

El líder ucraniano ha identificado las garantías de seguridad occidentales como uno de los tres mayores problemas aún por resolver en las negociaciones con Estados Unidos.

En una visita al campo de batalla el domingo y en declaraciones previas a la reunión del martes, Putin destacó las afirmaciones rusas de haber capturado Pokrovsk, una ciudad estratégica en el este de Ucrania.

Kiev ha negado que Moscú tenga el control total del territorio.

El mapa del campo de batalla, mantenido por DeepState, un grupo ucraniano vinculado al ejército, mostraba que los rusos habían tomado la mayor parte del centro de Pokrovsk.

Sin embargo, unidades militares ucranianas informaron públicamente el martes que la lucha continuaba.

Andriy Kovalenko, un alto funcionario del gobierno ucraniano centrado en las operaciones de desinformación rusas, dijo el lunes en una publicación en Telegram que el ejército ruso estaba mintiendo sobre la captura total de ciertas ciudades donde los combates seguían siendo feroces en un intento de moldear las opiniones de los negociadores occidentales.

«Los rusos harán muchos intentos de ejercer presión en el frente en las próximas semanas, y lo acompañarán de fuertes declaraciones», declaró Kovalenko.

«Todo esto se hace exclusivamente para el público occidental y para aumentar la presión diplomática».

Añadió: “La lucha por Pokrovsk continúa”.

En medio de las conversaciones de paz, el Kremlin ha tratado de marginar a Europa, describiendo regularmente a las naciones europeas que apoyan a Ucrania como pro-guerra.

Putin dijo el martes antes de la reunión que estaba dialogando con los enviados estadounidenses porque las acciones de Europa “tienen como único objetivo una cosa: bloquear completamente este proceso de paz”.

El líder ruso también amenazó a los aliados europeos de Ucrania, que han estado luchando por reforzar sus defensas contra Moscú.

“No planeamos luchar contra Europa, pero si Europa de repente inicia una guerra contra nosotros, estamos preparados ahora mismo“, dijo Putin.

Sugirió que Rusia estaría dispuesta a utilizar una violencia incluso mayor en un conflicto como éste que la que ha empleado en Ucrania, en una probable referencia al arsenal nuclear de Moscú, el más grande del mundo.

La Casa Blanca ha presionado fuertemente a Ucrania para que acepte un plan de paz. Inicialmente, Trump dio a Kiev hasta el Día de Acción de Gracias para tomar una decisión.

Ese plazo venció mientras continuaban las negociaciones, mientras Kiev y sus aliados europeos intentaban suavizar el plan estadounidense.

Rusia ha establecido una serie de condiciones para detener la guerra. Ha declarado, entre otras cosas, que Ucrania debe ceder el territorio que le queda en la región del Donbás, abandonar sus aspiraciones de unirse a la OTAN y asegurar el estatus del idioma ruso y de la Iglesia Ortodoxa Rusa en Ucrania. Ucrania se ha negado a aceptar las exigencias de Rusia.

En noviembre, las fuerzas rusas casi duplicaron los avances en el campo de batalla que lograron en septiembre, según DeepState, que utiliza imágenes de combate geolocalizadas y pistas del ejército ucraniano para monitorear los acontecimientos en el campo de batalla.

Si bien aún son relativamente pequeños, los avances rusos pusieron de relieve la creciente presión sobre el ejército ucraniano.

c.2025 The New York Times Company