Manifestaciones de agricultores cortan la autopista que une el norte y sur de Grecia

En este caso de malversación de fondos europeos hay implicados dos exministros de Agricultura del partido Nueva Democracia. Ante la magnitud del caso y para evitar nuevas irregularidades, la Comisión Europea ha exigido a Grecia la revisión el sistema de pagos, proceso que ha ocasionado retrasos en los cobros de las ayudas.

El Gobierno griego ha distribuido 363 millones de euros en anticipos en lo que va de año —en el ejercicio anterior fueron 476 millones—, con retrasos que superaron las cuatro semanas. Se calcula que más de 130 000 agricultores aún no han recibido los pagos pendientes. Entre ellos figuran cerca de 2.000 personas cuyas cuentas fueron bloqueadas por su relación con el fraude, así como otros 45.000 productores cuyos expedientes están pendientes de revisión. Según el ministro de Agricultura, Kostas Tsiaras, entre los afectados también se encuentran los propietarios de unas 11.000 parcelas con problemas catastrales y cerca de 13.000 ganaderos que quedaron fuera de las ayudas por no disponer de suficientes pastos.

Los sindicatos de agricultores critican también al Gobierno por no retirar el aforamiento a los dos ministros implicados. Esto permitiría que pudieran ser imputados y juzgados por la malversación de los fondos agrícolas. Según los sindicatos, muchos agricultores han recibido menos ayudas de las que les correspondían porque los fondos acababan en las manos equivocadas.

A las quejas por la malversación se suma la exigencia de la adopción de medidas urgentes para reducir los elevados costes de producción, que sumados al elevado precio del petróleo y la electricidad, dejan un escaso margen de beneficios a los agricultores del país y hacen que la actividad agrícola sea prácticamente inviable.

Escalada de las protestas

Las tensiones se han intensificado en las últimas horas tras las fuertes cargas policiales del pasado domingo, que dejaron varios heridos, entre ellos un agricultor que se encuentra hospitalizado con varias costillas rotas, supuestamente tras ser atacado por un agente de policía.

Desde el lunes, cientos de tractores han cortado la carretera nacional que une Atenas con Tesalónica —las dos principales ciudades del país—. Los sindicatos han decidido mantener y reforzar los bloques hasta que el gobierno de solución a sus demandas. Es la primera vez en la historia de Grecia que se interrumpe la circulación rodada en las principales arterias del país, en unas protestas que medios locales califican de «sin precedentes».

Por su parte, los agricultores de la región de Magnesia, en la Grecia central, han anunciado que impedirán la actividad en el puerto comercial de Volos, uno de los más importantes del país. Además, durante la mañana del martes, decenas de agricultores derramaron litros de leche y sacos de cereales frente al edificio de la autoridad regional en la ciudad de Lárisa.

El Ejecutivo de Kyriakos Mitsotakis ha pedido a la policía que no cargue contra los manifestantes y ha asegurado que los agricultores cobrarán los atrasos antes de que finalice el año.