El príncipe Andrew, aun en el ostracismo en la familia real, no podrá disfrutar de las vacaciones reales en el palacio escocés de Balmoral, donde se reúnen en agosto todos sus hermanos, hijos, sobrinos y nietos por invitación del rey.
La biografía de Virginia Giuffre, la víctima del tráfico sexual de Jeffrey Epstein, que acusó a príncipe Andrew, el duque de York, de delitos sexuales, lo acosa desde la tumba. Ella se suicidó el 31 de abril en su campo de Australia, pero ha dejado escritas sus memorias, que se publicarán en forma póstuma.
La tapa de libro, escrito por Virginia Giuffre, Nobody’s girl. Foto: Penguinrandomhouse
El libro, titulado Nobody’s Girl (Chica de nadie), se publicará en Estados Unidos el 21 de octubre. Allí contará su triste vida y dará su versión de cómo supuestamente fue violada por el duque, al menos tres veces, y por los importantes personajes que rodeaban a Epstein.
Terminó las memorias antes de morir
Giuffre, quien afirmó haber sido obligada a mantener relaciones sexuales con el duque cuando tenía 17 años, terminó sus memorias hace más de un año. Su familia la describió como una “guerrera feroz” que “siempre será recordada por su increíble valentía”.
Las memorias, que detallarán la experiencia de Giuffre a manos de Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell, aumentarán la presión sobre el duque. Él había llegado a un acuerdo extrajudicial multimillonario con su acusadora, pagado por su madre, la reina Isabel, de al menos 12 millones de dólares. Nunca tuvo que declarar.
Virginia Roberts Giuffre durante una entrevista con BBC. Foto: AP
El duque creía que con esto comenzaba su “operación limpieza” y podría reiniciar sus funciones oficiales. Pero se le ocurrió dar una entrevista a la BBC, donde no tuvo el menor respeto por sus víctimas ni se disculpó.
Fue eyectado de la familia real trabajadora. Las acusaciones de abuso sexual y violación nunca se han probado en un tribunal. El duque las ha negado de forma vehemente y repetidamente.
El ostracismo de Andrew
Hoy vive en el ostracismo, amenazado de ser desalojado de su Royal Lodge de 30 habitaciones que alquiló a la corona hasta el fin de su vida, por el rey Charles, su hermano. Mira televisión y anda a caballo por el parque de Windsor. Nadie sabe de dónde provienen sus fondos para vivir y cuál fue la herencia dejada por su madre, Isabel II, que es un secreto de Estado.
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A los 61 años, el duque de York llegó a un acuerdo económico con la mujer que lo denunció por haber sido forzada a mantener relaciones cuando ella tenía 17 años. El tercer hijo de Isabel II llegó a estar segundo en la sucesión al trono, detrás del príncipe Carlos. Siempre negó la acusación, pero llegó a un arreglo con Virginia Giuffre, hoy de 38 años, para evitar el juicio.
Andrew ha encontrado una coartada ridícula ante las acusaciones de Giuffre. La noche que ella afirmó haberlo conocido, él contó que había estado en Pizza Express en Woking con Beatrice, una de sus hijas. Sus aliados, como la hoy detenida Ghislaine Maxwell, han afirmado que una fotografía del duque con Giuffre juntos en Londres, en la casa de Ghislaine, fue falsificada.
Virginia Giuffre fue una de las víctimas más notorias del financista pedófilo Epstein, quien se suicidó en prisión en 2019, y de Maxwell, una “socialité británica”, hija del barón de la prensa Robert Maxwell, que cumple una condena de 20 años de prisión en Estados Unidos por reclutar niñas menores de edad.
A Virginiase la “robó” a Donald Trump, donde trabajaba como masajista. Esa es la razón de la ruptura entre Epstein y el presidente norteamericano, según su versión.
Una publicación de Penguin Random House
Las memorias de Virginia, madre de tres hijos que vivía en Australia, serán publicadas por Penguin Random House, que también publicó Spare, las memorias de Harry, el duque de Sussex.
Fuentes informaron al periódico que la publicación se retrasó inicialmente debido a sus problemas de salud.
Giuffre fue fotografiada a los 17 años con el duque de York, bajo la mirada de Ghislaine Maxwell.
Un portavoz de Knopf, una división de Random House, confirmó que publicarían el libro, a pesar de que Virginia Giuffre tenía previamente un contrato millonario con Penguin Press.
Giuffre fue fotografiada a los 17 años con el duque de York, bajo la mirada de Ghislaine Maxwell, en su departamento londinense en Belgravia.
El príncipe Andrés ha declarado “no recordar” que se tomó la foto. Se dice que el libro incluye más revelaciones sobre su tiempo con Epstein, Ghislaine Maxwell y sus amigos, incluido el duque de York.
Trump no aparece
Ted Doughty, de la editorial, no detalló qué allegados a Epstein aparecen en el libro. Pero sí afirmó que Virginia Giuffre no presentó ninguna acusación de abuso contra Donald Trump.
Jordan Pavlin, editor jefe de Knopf, describió las memorias como un “viaje crudo e impactante, la historia de un espíritu feroz que lucha por liberarse”.
Una fuente estadounidense declaró: “La familia de Virginia la ha visto difamada tanto en vida como en muerte. Cree firmemente que toda su historia debe contarse”.
Andrew sin amigos
El duque ya se ha retirado de la vida pública, dejando de lado los patrocinios reales y los cargos militares honorarios. Aparece únicamente en lo que el palacio ahora describe como “eventos familiares”.
El duque ya se ha retirado de la vida pública. Foto: AP
Este domingo no asistió a la iglesia en Balmoral con la familia real. Se fue antes hacia las Highlands en un Range Rover y no regresó para la misa. El rey, la reina, el príncipe y la princesa de Gales y sus hijos, la princesa real y el duque de Edimburgo, asistieron a la capilla de Crathie Kirk durante las vacaciones anuales de verano de la familia. Tampoco participó en la cacería.
El duque de York, quien se alojaba con su exesposa Sarah, duquesa de York, en Craigowan Lodge, una casa de 8 habitaciones en las cercanías del palacio, fue visto conduciendo su automóvil.
El duque y la duquesa han estado bajo una gran presión este verano, después de que una explosiva biografía de Andrew Lownie repasara detalles de sus complicadas finanzas y sus aventuras sexuales.
Lownie lo describe como “un adicto sexual” y Ghislaine Maxwell denunció ante el procurador que fue Sara Ferguson y Lynn Forester de Rothschild, y no ella, quien presentó al príncipe Andrew a Epstein.
Susan Ferguson, después Barrantes y madre de Fergie, era amante del príncipe Felipe, esposo de la reina, según el libro. Andrew y Sarah crecieron juntos en su infancia. El padre de ella administraba el equipo de polo real.
Los británicos quiere que le quiten el título
Las nuevas memorias, escritas por Virginia Giuffre, podrían causar aún más vergüenza al duque, a pesar de que los detalles de sus acusaciones contra él ya son de dominio público.
Una encuesta reciente reveló que dos tercios de los británicos desearían que el príncipe Andrés fuera despojado de sus títulos.
“Fergie intentó conquistar a Epstein”
El viernes, el Departamento de Justicia de EE.UU. publicó las transcripciones de una entrevista que le realizó a Maxwell en prisión. En la entrevista, Maxwell afirmó que Sarah, duquesa de York, intentó “conquistar” a Epstein.
Sarah, duquesa de York. Foto: Adrian Dennis / AFP
“Siendo honesta, pensé que Sarah estaba intentando conquistar a Jeffrey, y pensé que todo el asunto era molesto y me enojé muchísimo. Creo que Sarah fue quien lo incitó. Se conocieron y pasaron un rato juntos”, declaró.
“Creo que hubo dos o tres ocasiones en las que no tuvo nada que ver conmigo”, “no me estaba comunicando con Andrew, no estaba en contacto con él”, dijo Ghislaine, que podría ser perdonada por la administración conservadora porque aseguró que jamás vio a Donald Trump en una situación comprometedora y se comportó “como un caballero”.
El palacio de Buckingham no opina más sobre el duque de York. Su vocero personal declinó comentar.