Tyrone Curtis “Muggsy” Bogues (nacido el 9 de enero de 1965) es un exjugador de baloncesto estadounidense y el jugador más bajo en la historia de la NBA, con apenas 1,60 m de altura. Jugó como base durante 14 temporadas en la liga, principalmente con los Charlotte Hornets, aunque también pasó por los Washington Bullets, Golden State Warriors y Toronto Raptors. Se destacó por su visión de juego, terminando seis temporadas consecutivas entre los siete mejores en asistencias, y registró 146 dobles-dobles en su carrera. Pese a su estatura, bloqueó 39 tiros, incluido uno al legendario Patrick Ewing.
Muggsy Bogues en su etapa como jugador de los Hornets / NBA
¿Cómo está pasando esta semana aquí en Valencia, una semana por cierto muy calurosa?
Sí, entiendo que ha hecho calor en toda España. Me han comentado que ha pasado una ola de calor o algo así. Pero lo hemos estado pasando bien, hasta ahora ha sido divertido.
Una semana especial para la NBA. ¿Cómo de importante es para estos chicos y chicas que se están formando el pode participar en estas actividades?
Es muy importante. Especialmente para los jóvenes poder recibir estas informaciones, estos consejos, a su temprana edad les puede ayudar mucho. Tener tanto a la NBA aquí como a Kellog’s en este evento es impresionante. Quiero decir, tienes a chicos y chicas de seis países diferentes aquí persiguiendo sus sueños.
¿Qué siente al ver a estos jóvenes?
Ver como compiten unos contra otros, como se respetan y buscan sacar lo mejor de ellos al más alto nivel… es siempre una bendición presenciarlo. Estoy muy contento de formar parte de ello.
¿Cree que España es un buen lugar para que la NBA desarrolle este tipo de actividades?
¡Por supuesto! España es un magnífico país para desarrollar estos eventos. En todo el mundo en general, no hay un lugar específico. No hay ningún país que sea mejor que otro, especialmente si hablamos de formar a adolescentes. Todo se basa en que puedan adquirir información, buenos consejos, las herramientas para poder seguir creciendo.
¿Qué tipo de herramientas o consejos?
Es una bendición que tengan buenos entrenadores, que les permitan y les den esa información que necesitan para ser mejores jugadores y les beneficie a la hora de tirar para adelante.
Le preguntaba por España porqué usted en 1986 se proclamó campeón del mundial que se celebró aquí con el Team USA. ¿Qué recuerda de aquel campeonato?
Recuerdo que la prensa me llamaba “la Chispa Negra”, que más tarde descubrí lo que significaba. Fue una gran oportunidad para nosotros porque éramos jugadores universitarios. Y vinimos aquí y logramos una meta que nadie esperaba: enfrentarnos a algunos de los mejores equipos de Europa.
Y vaya equipos…
En aquel entonces, jugábamos contra la Yugoslavia con Dražen Petrović por ejemplo. Jugar contra ellos fue una bendición. Luego, Brasil con Oscar Schmidt, contra Sabonis con la URSS también… Fue un gran logro para nosotros como jugadores universitarios, poder colgarnos esa medalla de oro y volver a casa tras representar a nuestro país como corresponde. Fue un gran momento que nunca olvidaré.
¿Por qué cree que este tipo de torneos internacionales han cambiado mucho desde que usted era jugador?
Sí, por supuesto. Esa es una de las razones por las que tuvieron que traer al Dream Team en el 92, porque no les gustó lo que pasó en el 88. Así que sí, el juego ha evolucionado.
¿A qué se debe?
Los jugadores de todo el mundo han adquirido un talento tremendo y han perfeccionado sus habilidades. Mira, tenemos seis países diferentes aquí, a una edad temprana, y lidiamos con jugadores de 200 países en la NBA. En la liga tienes chicos de diferentes países, como Francia… O España también con Aldama en los Grizzlies.
¿Y cómo están mejorando estos jugadores europeos en la NBA?
Está mejorando mucho. Una vez que toman la delantera, comprenden cómo es la ventaja y cómo están jugando, la velocidad del juego. O sea, mira a Jokic, no se mueve nada rápido, pero es efectivo. Él sabe cómo jugar, cómo maniobrar, cómo disparar, cómo mejorar a sus compañeros. Así que se centró en dominar ese juego. Y eso es todo. Pero eso no solo lo han logrado los jugadores europeos. Los estadounidenses también lo han entendido bastante. Así es como el juego ha crecido tanto. Y no hay límites específicos en cuanto a tu procedencia. Da igual el país del que vengas en términos de lo bueno que puedes ser. Se trata de adquirir conocimiento, de tener una mentalidad que te diferencie de los otros y la voluntad de salir y convertirse en los mejores. Mira a Shai, de Canadá, se ha convertido en el MVP. Tenemos varios jugadores que se enfocan en este deporte para comprender cómo pueden impactarlo y convertirse en superestrellas de nuestra liga.
¿Y cree que cada veremos cada vez a más jugadores europeos en la NBA?
Por supuesto. El juego ha crecido. Personas de todo el mundo lo juegan desde pequeños. Y cuando tienes ese conjunto de habilidades, todo se reduce a eso. Una persona que te viene a buscar, te mira y te dice: “Necesitamos tus habilidades”.
Y para terminar, me gustaría preguntarle sobre la nueva competición que la NBA quiere implementar aquí en Europa ¿Cree que funcionará?
Creo que tendrá éxito. Es similar a lo que estamos haciendo en África.
¿Por qué piensa que tendrá éxito?
Creo que la élite invertirá especialmente en el tipo de equipos y comprenderá lo que implica cada organización. La manera en que opera la estructura de la NBA bajo el paraguas Comisionado de la NBA, Adam Silver, es excepcional en cuanto a su capacidad de observación, su capacidad para saber cuándo debería suceder y quiénes deben participar. Así que no sé cuándo puede suceder ni si sucederá, pero creo que será una realidad gracias a su comprensión del juego y a su deseo de seguir haciéndolo crecer, y de que el baloncesto actual es global.