Por Jesús García Regalado.- En la ciudad de Coro, en el estado Falcón, falleció este jueves 24 de julio el amigo, entrenador y exjugador profesional Teyo Salazar Guerrero. Su inesperado deceso fue ocasionado por un infarto sufrido en horas de la mañana.
Teyo Salazar nació en Mérida un 7 de julio de 1954, contaba con 71 años y estaba jubilado de la Universidad Francisco de Miranda donde laboró en el área deportiva. Estaba radicado en Coro donde formó una familia y se ganó el cariño y respeto de muchísima gente que hoy lamentan su partida.
Fue jugador de fútbol aficionado con las Selecciones de Mérida y Táchira donde jugó como refuerzo y llegó a ser campeón nacional. En el fútbol profesional defendió a Estudiantes de Mérida por varios años. Fue subcampeón de Liga en 1976 y 1977. Además jugó la Copa Libertadores de 1977 y 1978 con el académico.
Antes tuvo un paso por el Deportivo San Cristóbal junto a su hermano Mario Salazar. Cerró su carrera en el balompié rentado con el Atlético Universitario Falcón de Coro a principios de los ochenta y allí se retiró después de casi 10 años de carrera.
Se preparó y se convirtió en entrenador inicialmente de equipos aficionados del estado y de selecciones regionales. Dirigió en el fútbol profesional de segunda división en diferentes épocas a los equipos Unión Deportiva Falcón y Coro FC. Fue contratado por la Universidad y se afianzó en su cargo hasta jubilarse.
Teyo Salazar Vinotinto
En 1974 defendió la Selección Vinotinto Juvenil en el campeonato Sudamericano que se disputó en Santiago de Chile. En esta selección compartió con jugadores como Vicente Vegas, Ramón Orriols, Omar Salas, Alejo González y Vicente Flores entre otros. Todos brillaron en el fútbol profesional.
Teyo fue convocado a la selección absoluta para las eliminatorias del Mundial Argentina 78 pero se unió a un grupo futbolista que se negó a jugar el premundial. No asistió al primer llamado Vinotinto y luego quedó fuera de la convocatoria final.
A sus familiares y amigos, hacemos llegar nuestra palabra de pesar por su inesperada partida. Paz a su Alma.
